Para que las plantas crezcan fuertes y den buenos rendimientos, necesitan una nutrición equilibrada. Aquí te explicamos los nutrientes esenciales y su impacto en el cultivo:
Macronutrientes (NPK): Necesarios en grandes cantidades
Nitrógeno (N): Favorece el crecimiento de hojas y tallos verdes.
Fósforo (P): Impulsa el desarrollo de raíces y floración.
Potasio (K): Mejora la resistencia a plagas y enfermedades.
Micronutrientes: Necesarios en menor cantidad, pero igual de importantes
Hierro (Fe): Esencial para la fotosíntesis y coloración verde.
Zinc (Zn): Favorece el crecimiento y la formación de semillas.
Manganeso (Mn): Activa enzimas que fortalecen la planta.
Un suelo bien nutrido garantiza cultivos más productivos y resistentes. ¡Comparte este post con quienes trabajan en el agro!